La Hora Mágica ( I I )

miércoles, 7 de julio de 2004







     <<< On the air  >>>



De lunes a viernes,
casi todas las noches,
en plena madrugada,
en esa hora mágica
en que la vida
está callada
y el Mundo
parece  dormido,
en la oscuridad y silencio
de mi alcoba,
oigo un programa,
en directo,
a personas que llaman
unas
lloran,
otras ríen
cuentan sus vidas
sus alegrías
y tristezas.
exponen sus problemas,
unas veces es tan sólo
la soledad
la que les motiva a llamar,
para romper el silencio
de su vida,
que por el simple hecho de  
exponer y narrar
su problema
sienten que se alivia su pena;
otras piden ayuda
y cuentan situaciones extremas
y desesperadas,
algunas delicadas.
A una  mujer,
aparentemente joven,
que se limita  a escucharlos,
en silencio,
raramente algo les pregunta,
y a  tod@s despide diciendo
“Gracias por haber llamado”,
Mientras, por medio de algún e.mail,
algunos radioyentes
mandan sus mensajes
y opinan, en relación con
– según que caso-.
A veces resulta harto penoso
cortar el diálogo,
e ignorar el llanto  y
desconsuelo de
algun@,
pero en la Radio, como en cualquier
otro negocio,
el tiempo se mide ¡ en oro!
  
        I  I


Oyendo esto he pensado en ti
¡ ay, si yo pudiese,
si sobre ti ascendiente tuviese!
lograría Vida mía,
que esa voz tuya
pastosa,
cálida y deliciosa,
en alguna hora,
entre el atardecer
y el amanecer,
a las gentes llegase...

Que les hablase,
y no de guerra o política,
deportes,
comercio,
industria,
publicidad
concursos,
o del corazón
de los famosos
y famosillos...

¡ No, de nada de eso!

Tú les hablarías de otras cosas.
Evitarías otras  guerras,
la tuya sería otra política,
un nuevo ejercicio
para el alma,
otra, producción comercial
e industrial,
que no busca lucro
o beneficio material.
Harías publicidad
de los valores
que adornan al humano...
¡ Caridad,
bondad,
belleza
espiritualidad!
Sacarías a público concurso
el mejor  recurso,
para esa otra forma de amor,
que no ha de ser esa,
tras la cual,
corren  paparachis y medios de
comunicación
¡Orarías de los valores de la  ética y la moral,
y tratando de cortar
y arrancar  la de raíz todo mal,
hablarías de su AMOR!

Y en esa  HORA MÁGICA,
tu voz se escucharía
a través de las ondas,
sobre las  gozosas aguas,
del Mar
y de todos los Océanos.
Acariciaría   los Vientos
Y esparciría sus Mandamientos,
sobre la cálida Brisa del Sur,
la tramontana
y el Cierzo;
sobre al azul,
sobre el verde,
y el gris.
Sería bañada por la luz del Alba,
los rayos ardientes del Sol
por los  destellos de Selene..

Llegaría a todos,
sedientos
Y hambrientos
A los que moran entre tinieblas,
ocultando su soledad y tristeza,.
A los seres menesterosos,
A los  menos  pobres y necesitados,
A los que desde el corredor de la muerte
suplican perdón y clemencia,
A aquellos que imploran y
reclaman justicia;
despreciados
marginados y odiados,
a todos aquellos, que por uno u otro motivo,
moran  en  eterno desvelo,
intentando alcanzar
un  sueño

Yo ansío
que degusten
el néctar consolador;
y la ambrosía
de tan exquisito licor,
que seas, para su sueño
anhelo,
y deseo,
el bálsamo
que alivie
y cicatrice
su dolor y heridas;
Que al oírte
Se cumpla su ansia,
y les mueva a bendecirte.
Que ya no se sientan solos
Que por tu mediación,
¡ SUS palabras
y promesas,
iluminen
esas vidas
que de Su amor
se sienten relegadas,
olvidadas
y mal queridas.
Que en todos los lugares de este MUNDO
sobre el tenebroso y
brumoso Océano ,
toda vida,
reciba la luz del Faro, esplendoroso
que les habrá de llevar
a buen puerto.
Creo que por eso ha sido
que tú y yo
nos hemos, aquí en la Tierra,  cruzado,
sintiéndonos hermanados
al formar parte del Poder
que nos ha creado...

¡ Si lo consigo,
entre los dos...,
  tú y yo
habremos logrado
enjugar la dolorosa  lágrima
de la tristeza,
y poner una dulce sonrisa
en el rostro de Dios
alentando,
la esperanza de su Obra,
incorporando
un nuevo
grano
de arena
al reloj del Tiempo.

AnnLOuise
  l.h.q.c.e.l.l.

    
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