Poemas
La casa rosa...!

martes, 15 de julio de 2003



¡ Dulce Melancolía!
A mi querida amiga,
Lunnula,
con cariño .

^^^^^^^^^



Creo que lo primero
que acierto a recordar
de mi infancia
Es la bella mar,
Leguas y leguas de arena
Dorada,
Agua salada,
Mi mar soñada,
Y amada,
Exasperada o calmada...

La casa rosa de la playa,
A las orillas del Pacífico;
Todo era tan bello
Alegre
Había luz
Ilusión
Fantasía
Sueños...

Amanecía a la vida
Bajo la luz del Alba,
Más tarde, lo hacía, a pleno sol,
Un sol dorado
Que destellaba
sobre la línea turquesa
De la playa

Recuerdo a una niña
De cabellos de oro
Y ojos de zafiro
Que,
cual si fuese una princesa,
era el mayor tesoro
de su padre,
ambos iban caminando,
cogidos de la mano,
Recuerdo sus risas,
sus caricias
todas sus enseñanzas
y la felicidad
de tener seguridad...

Después los malos vientos
soplaron
las sombras
mis recuerdos envolvieron
nos llegó el silencio
y todo cambió
un gigantesco muro
Rodeó la vida,
Nos llegó la ausencia
La desilusión
La angustiosa soledad,
una intensa desesperación,
los
Ruegos,
los
Llantos,
las
Preguntas
¡ Preguntas
Y, más preguntas!
A las que
Nadie respondió

Y así
Sin transición,
De un empellón,
aprendí que la vida
Tiene noche y día
Alegría
Y tristeza
Y que todo puede mudar
Antes de que tú alcances a parpadear,
Y que siempre
preparada habré de estar
Para partir
Sea Junio o Diciembre,
Ya que nunca jamás
nada mío
Me voy a permitir
Que la vida
Es un breve tránsito
Y que para recorrerlo
Tan sólo se necesita
Conformidad,
Aceptar
Y adaptar
esta realidad
a nuestro vivir
y
que yo así
nunca volveré a sufrir
trataré
de sobrevivir
en medio
de la vorágine
por siempre tendré fe
jamás desesperaré,
pues no esperaré
demasiado,
ni milagros
ni fortuna,
tan sólo
conservar intactos
mis sueños,
todos los ideales
de mis dorados
lares,
esos lugares
sagrados
privados,
en los que brilla una
intensa luz,
donde arde una
eterna llama de gratitud
por haber
visto
Tú mano
mostrando
El camino
De mi
Destino,
Esa
estrella
Que brilla más allá
Que de nuevo
Me conducirá
A la Casa Rosa
En la que siempre
Se oye
Una dulce melodía
Plena de armonía
Se escucha
El trino del ruiseñor
Que nos habla del amor,
Se aspira el aroma
perfumado
de
la rosa,
de los
olorosos
nardos
y jazmines
que crecen en los hermosos jardines
y nos permite escuchar,
sea noche o día
la Sinfonía
de la Mar
bajo
el dorado
rayo del sol,
si es verano,
bajo
la bruma azulada
del invierno,
las niebla opalina
de la radiante primavera;
los lánguidos arrullos
que nos llegan
con los murmullos
del Otoño

^^+^^


Ann Louise
Comentarios sobre este poemaEnviar a alguien
Deja tu opinión:
Usuario:      Contraseña:           Registrarse

Buscar poema introduciendo algún elemento del título o de su contenido:

Lista de los últimos poemas         Lista de categorías