Igoro con cual viento
ha llegado el olvido,
y entiendo que tú jamás has sabido
el inmenso valor del tesoro
que en tu camino
puso el destino
Pleno de afecto
de cariño sincero y verdadero
desplegó ante ti
un mundo de ilusiones
belleza, fantasía
y ensueños
Pero donde había afecto sincero
se cambió por ausencia
donde había sinceridad
se programó frivolidad
donde nacía la sencillez
se respondió con inmadurez
donde hubo calidez
han surgido vientos
de silencio, ausencia y vacío...
Pero aún es tiempo
para que pueda reafirmar
que los vientos suelen regresar
a su punto de partida
y que por ello volverán a mí
multiplicados
a modo de renovación.
El silencio volverá
convertido en un inmenso lago
de quietud y olvido donde
ni una triste llama de amor arderá
La ausencia llegará a ti
convertida en enorme océano
donde es imposible divisar
el saludo de un sólo navio
de un sólo amigo
El vacío será
como un triste y largo día
que envolverá tu vida
y llenará tu corazón de soledad y frío
La vida nos suele dar la cosecha
del fruto, en ella, sembrado
pero a veces sucede
que los vientos, las lluvias,
las tempestades actuan antes
pese a ello...
Yo no me arrepiento de nada
mientras hice el bien
fuí semilla de paz
y sembré bondad en mi alma
bienestar para mi vida
afecto y sentimiento
¡ No, nunca me arrepentiré
pese a no haber podido recoger
la cosecha ansiada ... !
Pero mi bagaje se halla entero
y sin mácula, porque confío en la vida
y en sus diversas estancias, situaciones,
lugares, encuentros
que generan dicha y bienestar...
