A la Muerte de un Amigo y Poeta.
Tu voz se ha apagado, amigo mío,
como el último suspiro del crepúsculo,
dejando un vacío inmenso,
una herida abierta en el alma del cosmo,
endulzada por el almíbar de tu gracia,
de tu simpatía
de tus visitas comentarios
Eras el guardián de las palabras,
el tejedor de sueños y verdades,
y ahora tus versos flotan en el aire,
eternos, inmortales, indomables.
Recuerdo tus risas compartidas,
tus ojos brillando con historias no contadas,
tus manos que daban forma al viento,
creando magia en cada gesto, en cada trazo.
El tiempo, cruel e implacable,
te ha llevado a un lugar desconocido,
donde quizás encuentres nuevas musas,
donde la poesía nunca muere ni se olvida.
Nos dejas con un legado insuperable,
con la huella imborrable de tu genio,
y aunque tu presencia se ha desvanecido,
tu espíritu vive en cada poema, en cada palabra.
A ti, amigo y poeta,
mágico, delicioso,
gentil y amable
dedico estas lágrimas y estos versos,
con la esperanza de que, en algún rincón del Paraíso,
aún puedas escuchar nuestras voces,
aún puedas sentir nuestro amor.
Nuestro afecto y simpatía,
Nuestra admiración y respeto…
Tu amiga,
¡Por saecula saeculorum!
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:copyright: Primavera
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