Bravo!
Lectura recomendada
de cinco a trope mil tropecientos años.
baja en calorias, sin sal, azúcar
ni triglicéridos
de fácil digestión.!
Hoy Domingo. día del Señor
retrocedí a mi infancia a través
de un sueño...
A aquel pueblecito
dejado, aparentemente, de la mano de Dios
llegó una noche el circo,
y qué pena fue ver que nadie aplaudió a los payasos
que se sintieron muy tristes, desmoralizados
y desilusionados...
¡ Pobrecitos pensé,
tengo que hacer algo,
por ello cuando volví lleve conmigo
a mi querido perro de lanas “Flow”..
Dado que por donde quiera que vayamos
él siempre va aplaudiendo
y " canto-ladrando"
con entusiasmo.
Bravoooooo”
Bravooooooooooooo
y yo, a su lado, en el circo, me veo aplaudiendo....
¡Muy bien, Muy bien,
Estupendo!
Bravo!
Y así al final se animará el Circo
y todo irá sobre ruedas,
en aquel pueblo.
Pues ver reír al payaso es grato,
pero ver llorar a los pobrecitos payasos
me rompía el corazón.
¡ Qué alegría!
Ahora ya son felices
y sumamente alegres,
divertidos,
a su vez hacen felices,
muy, muy felices a todos
los niños del lugar.