A la memoria de mi madre
en la noche de su partida
Veo un amor, el primero y último de mi vida.
Amor de colores, olores y sabores.
Amor de dulces palabras. Amor de sonidos musicales.
Veo un amor sabio y prudente.
Amor de veinticuatro horas y
amor de todos los días, de todos los años.
Amor que se estremecía siempre
por las injusticias del mundo y que respondía ante ella,
generoso para ayudar a todo el que así lo requiriera.
Instrumento de Dios, fueron todos tus actos
un ejemplo que nadie podría seguir,
cómo alcanzar a comprender siquiera tu simple sabiduría.
Tu amor de puertas abiertas y de platos a la mesa
para todo el afortunado que llegara y se deleitara
por tu don de darle sabor y color a la vida.
Veo un amor que nunca pidió nada
por todo lo inmenso que generosamente regalaba.
Un Amor que jamás se rindió ante nada
y que batalló con ternura, paciencia y amor,
todas las indignidades de los indignos del mundo.
Te extrañarán tus plantas, tus animales,
te extrañará el aire y todo este mundo
que lo creaste maravilloso.
Te extrañan mis oídos, mi mente y mi corazón.
Te extrañan todos mis sentidos,
Porque…
¿quién esperará ahora mis regresos?
Gracias Gran Arquitecto del Universo,
porque nos reuniste en el mejor de los tiempos.
Gracias porque a ella le diste un corazón
capaz de amarlo todo, de comprenderlo todo,
y, en mis desconsuelos y en tantos
sinsabores cotidianos,
tus palabras brotaban abundantes por sus labios
y eran el bálsamo que curaba toda herida.
¿Quién puede curar ahora este dolor de su ausencia?
Perdóname por no haber logrado ser
lo que cualquiera a tu lado hubiese alcanzado,
sé que tu generoso corazón, siempre me perdonó
aún antes de que mis continuos errores llegaran.
Pero me queda solo contar el tiempo para reencontrarte
y tu ejemplo para tratar de hacerlo todo mejor.
Si hay un premio en la vida Madre Adorada,
es el que se encuentra en la muerte.
No se valen las imposturas, ni se compra
con todo el dinero del mundo.
Tu vida digna, acompañada está en esta hora
por todos a quienes nos enseñaste a amarte
con obsesión, que te lo debemos todo y,
por aquellos que supieron descubrir
en tu cálida alma de mujer en tus bondades
y en tus ejemplos,
el Amor inconmensurable de Dios.
MADRE LUNA
URL: VIDEO DISPLAY
DATOS BIOGRÁFICOS DEL AUTOR:
Nace en Quito - Ecuador, el 22 de julio de 1961, hijo del Dr. Edmundo Echeverría Arias y de la señora Rosa Dalgo Vallejo. Es nieto del insigne compositor ecuatoriano Pedro Pablo Echeverría Terán (autor del albazo “Amarguras”, el pasillo “Cansancio”, del yumbo “Queja Indiana”, entre muchos otros).
Se inicia como autodidacta de la guitarra y realiza varias composiciones. Más tarde ingresa en el Conservatorio Nacional de Música de Quito, y en poco tiempo logra varios triunfos en certámenes de interpretación guitarrística. Entre otros: Primer Lugar en el Certamen “Homero Hidrovo” (1996).
Su maestro fue el concertista de guitarra Terry Pazmiño T.
En el campo profesional, ha desarrollado sus actividades dentro de la comunicación. Posee una licenciatura en periodismo de investigación y cursos de especialización. Asesor de Imagen en entidades públicas como la Dirección Nacional de Tránsito, coordinó la campaña "No más corazones Azules " (2005), Asesor del Banco del Estado (2006), Jefe de Relaciones Públicas de Petroproducción (2007), entre otros.
En la actualidad es gerente de la empresa PRODIGITAL de video-producción, ha creado documentales, para "EL FORO DE LA CIUDAD", vídeos, campañas y presentaciones multimedia para empresas e instituciones.
DATOS SOBRE SU OBRA:
“El otro lado de la Luna” fue estrenada en el Centro Metropolitano de Cultura de la ciudad de Quito, el 25 de agosto del 2004. La obra fue exitosamente presentada en la ciudad de Nueva York en el Centro Cultural NATIVES, el Waterfront Festival de St. Island y en el encuentro cultural Germano-Latino de la ciudad de Hamburgo en noviembre y diciembre del mismo año.
Esta obra única en su género. se presenta en un pack que contiene un CD-MUSIC, un DVD y un poemario.
